Amenazas Globales y Soluciones Soberanas
AMENAZAS GLOBALES
Las amenazas globales se identifican como las causas subyacentes de los conflictos y la inseguridad; al mismo tiempo pueden identificarse como las determinantes probables de futuros conflictos.[1] Una amenaza global conduce a la inestabilidad global sustancial y/o a la pérdida a gran escala de vidas humanas, magnitud que no es alcanzada por otros tipos de amenaza. Así, podrían mencionarse como amenazas globales: el cambio climático, la competencia por los recursos, la marginación por enfermedad, raza o clase social y la proliferación de armas de destrucción masiva.
SOLUCIONES GLOBALES CONTRA SOLUCIONES SOBERANAS
Las “amenazas globales” requieren “soluciones globales”, difícilmente puedan lograrse efectos deseables con “soluciones soberanas”, entendidas estas como las que toma un país de manera unilateral, haciendo uso de su soberanía y tomando decisiones respecto de un problema específico y en circunstancias en que dicha decisión no precisamente es avalada por Estados vecinos, mucho menos puesta a consideración en el marco de bloques regionales.
Las respuestas a amenazas que consisten en medidas para mantener el status quo, son sistemas que buscan controlar la inseguridad sin abordar las causas subyacentes. En cambio una respuesta sostenible ante una amenaza global busca la cooperación – entre Estados – para resolver las causas subyacentes de la inseguridad.
Por consiguiente, el terrorismo, el narcotráfico y el crimen organizado internacional entre otros son relativamente menores si se comparan con las amenazas globales, que a la larga, son la causa subyacente de las primeras.
Las amenazas globales se identifican como las causas subyacentes de los conflictos y la inseguridad; al mismo tiempo pueden identificarse como las determinantes probables de futuros conflictos.[1] Una amenaza global conduce a la inestabilidad global sustancial y/o a la pérdida a gran escala de vidas humanas, magnitud que no es alcanzada por otros tipos de amenaza. Así, podrían mencionarse como amenazas globales: el cambio climático, la competencia por los recursos, la marginación por enfermedad, raza o clase social y la proliferación de armas de destrucción masiva.
SOLUCIONES GLOBALES CONTRA SOLUCIONES SOBERANAS
Las “amenazas globales” requieren “soluciones globales”, difícilmente puedan lograrse efectos deseables con “soluciones soberanas”, entendidas estas como las que toma un país de manera unilateral, haciendo uso de su soberanía y tomando decisiones respecto de un problema específico y en circunstancias en que dicha decisión no precisamente es avalada por Estados vecinos, mucho menos puesta a consideración en el marco de bloques regionales.
Las respuestas a amenazas que consisten en medidas para mantener el status quo, son sistemas que buscan controlar la inseguridad sin abordar las causas subyacentes. En cambio una respuesta sostenible ante una amenaza global busca la cooperación – entre Estados – para resolver las causas subyacentes de la inseguridad.
Por consiguiente, el terrorismo, el narcotráfico y el crimen organizado internacional entre otros son relativamente menores si se comparan con las amenazas globales, que a la larga, son la causa subyacente de las primeras.
AMENAZAS DERIVADAS DE LAS AMENAZAS GLOBALES
Diferente al tipo de amenaza global, se encuentran las amenazas que los Estados combaten tanto con medidas unilaterales – digamos soberanas – y con medidas bilaterales y hasta regionales.[2] Tales amenazas están identificadas como “nuevas amenazas” en la Declaración sobre Seguridad de las Américas celebrada en la ciudad de México el 28 de octubre de 2003. Entre estas se mencionan el narcotráfico, el crimen organizado internacional, el terrorismo, la pobreza, el deterioro del medio ambiente y la trata de personas, entre otras. Algunos analistas también les llaman “amenazas emergentes”.
AMENAZAS Y RIESGOS
Se identifica entonces una diferencia entre amenazas globales y las “nuevas amenazas”definidas en la Declaración sobre Seguridad de las Américas. Sobre estas existen criterios que sostienen que diferencian entre las amenazas que tienen capacidad e intención de desestabilizar el orden constitucional del Estado y aquellas, que aunque afectan la seguridad y pueden producir desequilibrio social o económico, no poseen la capacidad ni la intención de desestabilizar. Según este criterio al tipo de amenaza que no tiene intención desestabilizadora se le llama “riesgo”.
Se identifica entonces una diferencia entre amenazas globales y las “nuevas amenazas”definidas en la Declaración sobre Seguridad de las Américas. Sobre estas existen criterios que sostienen que diferencian entre las amenazas que tienen capacidad e intención de desestabilizar el orden constitucional del Estado y aquellas, que aunque afectan la seguridad y pueden producir desequilibrio social o económico, no poseen la capacidad ni la intención de desestabilizar. Según este criterio al tipo de amenaza que no tiene intención desestabilizadora se le llama “riesgo”.
Bajo estos argumentos el terrorismo es una amenaza en Colombia, pero en Guatemala constituye, al menos de momento, un riesgo. En el caso del narcotráfico podría ser discutible si es o no en la actualidad una amenaza en Guatemala ya que para algunos analistas busca únicamente trasegar la droga y obtener los beneficios económicos antes que desestabilizar al gobierno. Pero para otros, el narcotráfico ha comenzado a socavar las instituciones del gobierno. Las pandillas juveniles ejercen control a voluntad en sectores urbanos sin que las autoridades logren garantizar seguridad. ¿Amenaza o riesgo? Esto deberá quedar como elemento esencial de inteligencia.
Los riesgos y las amenazas en cada Estado según su particular situación, constituyen el escenario subyacente del cual se originarán las amenazas globales. Estas se consolidarán con el correr del tiempo si en vez de tomar decisiones globales que provean la cura, se siguen tomando decisiones soberanas que atacan los síntomas.
OTROS CONCEPTOS
AMENAZAS TRADICIONALES
Se entiende por amenazas tradicionales a la seguridad las acciones derivadas de la escalada de conflictos entre Estados soberanos que puedan generar crisis y/o conflictos armados.
AMENAZAS ASIMÉTRICAS
Se denominan así, a aquellas que provienen de adversarios con características superiores en recursos y tecnología en relación a sus oponentes, y que han desarrollado estrategias orientadas a evitar un conflicto abierto, empleando medios y tácticas no convencionales.
Sus principales características son:
No existe un enemigo definido, por lo que son de difícil identificación.
No necesariamente está ligada a un Estado, pudiendo provenir de grupos u organizaciones, como los fundamentalistas, terroristas, o narcotraficantes.
No existe un enemigo definido, por lo que son de difícil identificación.
No necesariamente está ligada a un Estado, pudiendo provenir de grupos u organizaciones, como los fundamentalistas, terroristas, o narcotraficantes.
[1] Chris Abbott, Paul Rogers, John Sloboda, Respuestas globales a amenazas globales, 23/09/2006.
[2] Entrevista a Emilio Ontiveros, Foreing Policy, octubre 2008.