El ejército durante la tormenta Agatha y erupción del volcán de Pacaya
Reducida a depresión tropical el 29 22:00 horas mayo 2010. (foto Cuerpo de Ingenieros en facebook)
El 27 de mayo de 2010 en horas de la tarde el volcán de Pacaya hizo erupción. El ejército empeñó 144 hombres en el área del volcán, las unidades participantes fueron la Unidad Humanitaria de Rescate (UHR quienes participaron en el rescate a víctimas del terremoto en Haití), Brigada Guardia de Honor, Brigada Mariscal Zavala y Cuarta Brigada (Suchitepequez).
Desde el 28 de mayo, 947 hombres fueron empeñados en la limpieza de arena volcánica en la capital y del aeropuerto “la aurora”. En esta misión conjunta con autoridades, municipalidad capitalina y población participaron la Brigada Guardia de Honor, Brigada Mariscal Zavala, Cuerpo de Ingenieros, Brigada de Paracaidistas (San José, Escuintla), Brigada de Artillería (Salamá BV), 2ª Brigada (Zacpa), 3ª Brigada (Jutiapa) y Comando Aéreo Central.
Esta y más fotos de los trabajos en la página facebook de la municipalidad de Guatemala
El 29 de mayo en horas de la madrugada, mientras los trabajos de limpieza se desarrollaban, ingresa al territorio la tormenta tropical Agatha la cual provocó derrumbes, hundimientos e inundaciones en diferentes partes del país.
Las Brigadas Militares del interior procedieron a integrarse en los Comités de operaciones de emergencia (COE) departamentales en coordinación con autoridades locales.
El ejército, instituciones gubernamentales, no gubernamentales y población, de manera conjunta, se encuentran trabajando en zonas de inundación, derrumbes, albergues, búsqueda, rescate y evacuación de personas.
A continuación un mapa que ilustra la situación al 30 de mayo de 2010. Las gotas celestes representan inundaciones. Las flechas verdes representan puentes colapsados o a punto de colapsar. El triángulo marrón representa zonas de derrumbe y las casas verdes y amarillas las localidades donde se instalaron albergues.
La cantidad de personas fallecidas confirmadas aumentó a 93, hasta el momento el departamento con más víctimas fatales es Chimaltenango con 49, le sigue Guatemala con 24 y Sololá con 20.
ResponderBorrarLos damnificados de la tormenta necesitan:
ResponderBorrar1. Arroz, frijol, maíz y sal; aceite para cocinar; agua potable; incaparina.
2. Frazadas, papel higiénico, pañales, esponjas y elementos para higiene.
3. Antibióticos, analgésicos, antipiréticos y antiofídicos.
4. Utensilios para cocinar, instrumentos para remover escombros o tierra, chalecos fosforescentes.
Enviar al Aeroclub de Guatemala, 11 av. 15-00, zona 13
http://www.facebook.com/profile.php?id=1349684859
Informe CENACIDE
ResponderBorrarOficialmente hay al menos 83 muertos. Extraoficialmente, la cifra rebasa los 100. ¿Por qué la Conred no pudo reducir más la cauda del desastre?
ResponderBorrarEs muy difícil mover una "brigada" de rescate a cada punto, cuando el fenómeno natural ya está en progreso.
ResponderBorrarNo puede permanecer una brigada de rescate organizada permanentemente porque no hay suficientes policías, soldados, maquinaria, medios (aéreos, terrestres) para enviarlos a cada punto donde cada año hay inundación.
Si los hubiera (medios), se cuestionaría: ¿por qué un aparato de Conred tan grande y con tan alto presupuesto? (no hay tormentas tan seguido).
A veces las personas (damnificadas) no aceptan abandonar lo poco que tienen y se niegan a ser evacuadas, esto complica.
Conclusiones:
Siempre se puede reducir el efecto: previniendo, anticipando y con una buena organización (liderazgo) y reacción; pero estos cálculos y apreciaciones pueden en un momento dado resultar (parecer) inútiles e insuficientes contra la fuerza de la naturaleza.
Lo que sí se puede hacer es: estar un poco mejor preparados (con lo que hay a disposición en medios) para las tormentas que ya se sabe que vendrán en lo que resta del año.
Hay que pensar en soluciones de largo plazo que permitan reducir la vulnerabilidad del país ante tales fenómenos y mitigar los efectos negativos de los mismos.
ResponderBorrarTomar en cuenta las lecciones aprendidas después tres tormentas (Mitch, Stan y Agatha). La planificación urbana y regional debe tomar en consideración las debilidades que han magnificado los costos de este tipo de desastres.
Evitar que la ayuda se limite al puro clientelismo y uso de fondos públicos con fines electorales o aprovechar la desgracia de miles de familias para publicitar hasta el cansancio el carácter “solidario” del gobierno.